sábado, 29 de agosto de 2015

El Shiba Inu, una de las razas más famosas de Japón

El Shiba Inu fue difundido en las prefecturas de Fukushima, Nagano, Gumma y Shimane, entre otras. De origen antiquísimo, se supone que es proveniente de Asia meridional, de épocas primitivas. Lo cierto es que se hallaron huesos pertenecientes a esta raza entre las ruinas de la época Jomon (500 a de Cristo).Con lo cual es una de las razas de perros más antigua de las queremos constancia.

Su nombre, Shiba Inu, en el dialecto de la prefectura de Nagano significa “perro pequeño". Es excelente guardián y se emplea asimismo para cazar animales pequeños.


razas de perros


Rasgos generales: De estatura pequeña, bien formado, ceñido y musculoso, bastante elegante. Tiene gran agilidad y expresión vivaz y amistosa. Es obediente y fiel.

Altura: En la cruz, de 37,9 a 40,9 cm.

Cabeza: La nariz es de color oscuro. El dorso del hocico, recto. Los labios son poco pesados. Hocico puntiagudo, ni grueso ni largo. Dentadura sólida, sin prognatismo. Caída naso-frontal marcada sin exagerar. Frente ancha con surco medio levemente marcado. Mejillas bien formadas.

Ojos: Pequeños, triangulares, de color pardo oscuro.

Orejas: Pequeñas, triangulares, derechas e inclinadas adelante.

Cuello: Robusto y grueso.

Tronco: El tórax es profundo, con costillas arqueadas. Dorso derecho y corto. Lomo ancho y potente. El vientre es retraído. Organos sexuales perfectos.

Cola: Gruesa y fuerte, enroscada o en forma de hoz.

Extremidades:
  • Las anteriores, de hombros desarrollados, oblicuos. Antebrazos derechos, codos pegados al tronco. Metacarpos poco inclinados.
  • Las posteriores de muslos y piernas desarrolladas. Garrón muy derecho.
  • Pies anteriores cerrados y algo redondos. Uñas duras y oscuras; plantas duras. Los posteriores son semejantes a los delanteros.

Manto y Pelaje:
  • Pelo:duro y derecho, con subpelo fino.
  • Color: rojo, berrendo, negro o blanco. También barcino.


Andar: Es ligero, enérgico y vivaz.

martes, 11 de agosto de 2015

El Pequinés

La forma primitiva de Pequines quizá se halle en un perro zorruno del sudeste asiático, procedente, procedente, a su vez como todos los de su raza, del perro de las turbares.

El realidad, se desconoce su verdadero origen. Sólo se sabe que es muy antiguo, tal vez contemporáneo del celeste Imperio y que es una de las razas de perros pequeños más famosa.

En China existe una leyenda muy curiosa que establece los orígenes, aunque no científicos. Un león se enamoró  cierto día de una pequeña mona, a la que quiso desposar; pero antes era necesario presentarse ante el dios Hai-ho quien le dijo al león:

"Si estás dispuesto a sacrificar tu fuerza y tu estatura por amor hacia esa mona, consiento que te cases con ella.”

El león aceptó la imposición y el fruto de esa unión fue el perro pequinés que conservó el porte orgulloso y la noble expresión del rey de la selva, junto con la ternura y la gracia de la pequeña mona.



El Pequinés llegó a Europa, mejor dicho a Inglaterra, en 1861, después de la caída de Pekín y de la destrucción del Palacio de Verano a manos de las tropas franco-inglesas. Los oficiales ingleses llevaron, como botín, algunos ejemplares, de los cuales uno fue ofrecido como obsequio a la reina Victoria. De esta manera, la cría europea contó con sus primeros antepasados. 

A continuación se desarrolló de tal manera, con tanto celo, que se obtuvieron ejemplares de una belleza esplendente. En cambio, en su país de origen decayó súbitamente y fue necesario importar reproductores de Europa y Australia.


Las dimensiones, los datos somáticos y los rasgos generales han sufrido importantes modificaciones, cada vez más lejos del perro tipo. La confrontación entre el estándar oriental, redactado hace unos cuarenta años, y el estándar europeo lo demuestra claramente, por otra parte, desconocemos las condiciones actuales de la cría en China.

Rasgos generales

Pequeño, membrudo, valiente, bien equilibrado y gallardo. Independiente y de aspecto leonino.

Peso: De 2 a 8 kg.

Cabeza: La cabeza es maciza. Aplastada, vista de perfil. Nariz situada muy alta entre los ojos, corta y ancha, con fosas grandes, de color negro. Boca con buen cierre, sin dientes ni lengua visibles. El hocico es ancho y fruncido. Stop poco profundo. Cráneo amplio y achatado entre las orejas.

Ojos: Grandes, cristalinos, de color oscuro y brillantes.

Orejas: En forma de corazón, con franjas muy largas y profusas.

Cuello: Corto y grueso.

Tronco: Corto con tórax amplio. Las costillas son muy arqueadas. El dorso en línea recta. El esternón bajo entre los antebrazos.

Cola: De inserción alta, de porte rígido, levemente curvada sobre el dorso.

Extremidades:

Las anteriores, cortas y gruesas, con hueso pesado y arqueado, pero sólido en el hombro.

Las posteriores más leves que las anteriores, aunque sólidas y aplomadas. Los garrones, robustos y sin torcer.

Pies grandes y aplastados, no redondos. Los anteriores ligeramente vueltos hacia fuera.

Manto y Pelaje: Pelo: largo y tieso, con abundante crin. Más bien basto.

Color: todos los colores, incluso el berrendo.

martes, 4 de agosto de 2015

Lhassa Apso

Como es bien conocido en la cinofilia, el Lhassa Apso se formó por medio del cruce entre el terrier del Tíbet y el spaniel tibetano. Por su estatura pequeña, su carácter simpático y su hermosura física, no tardó en granjearse la simpatía de todos como excelente perro de compañía.




En su país de origen, al menos hasta la anexión de la República Popular China, vivía en los monasterios, y los ejemplares más bellos y valiosos se hallaban en Pótala, el palacio del Dalai Lama, así como en las residencias de ministros y otros personajes. Era imposible obtener empleos por dinero, y sí excepcionalmente, mediante el obsequio de un ejemplar de Lhassa Apso. Además por aquel entonces no eran necesarios los seguros para perros.

Como me relató un lama del Tibet -escribe la autora C. J. Seltzer-, los ejemplares de escaso valor vagan por los poblados, alimentándose con lo poco que les da la gente. Los ejemplares más valiosos, sin embargo, son considerados como piedras preciosas. El Lhassa Apso no se usa en ningún trabajo. Dotado de un oído muy fino, percibe bien los rumores leves y lejanos, dando la alarma con su carácterística voz clara y aguda. Por esta razón, en lengua tibetana se le llama apso seng kye, que quiere decir "perro centinela con ladrido de león”.

También en China, en la corte imperial, a la que llegaban desde el Tibet como “ofrendas tributarias”, eran bien acogidos y contribuyeron a formar la raza shih tzu.

Rasgos generales

Carácter alegre, lleno de seguridad y prudencia ante los desconocidos.

Altura


De 22,5 cm. a 25 cm., para los machos; las hembras son algo más bajas.

Cabeza

Cascada de pelos sobre los ojos; barba tupida y bigotes oscuros. Nariz negra. El dorso del hocico es recto y medianamente largo. Cráneo moderadamente estrecho.

Ojos

Oscuros, de tamaño mediano, ni pequeños ni hundidos.

Orejas

Colgantes con franjas pesadas.

Cuello

Fuerte, con collar de pelo abundante.

Tronco

Longitud mayor que la altura en la cruz. Costillas arqueadas, sin ser chatas. Lomo fuerte; grupa bien desarrollada.

Cola

Con franjas nutridas. La lleva por encima de la grupa.

Extremidades

Las anteriores derechas, con abundante pelo.
Las posteriores, bien desarrolladas, con mucho pelo.

Pies redondos, con abundante pelo y almohadillas plantares sólidas.

Manto y Pelaje

Pelo: pesado, duro, derecho, ni sedoso ni lanoso, bastante largo. Subpelo muy tupido.

Color

Dorado, miel, arena, gris oscuro, pizarra.