miércoles, 25 de febrero de 2015

Fenómenos generales de la lactancia


Sólo a finales de la gestación, las células de la glándula mamaria empiezan a secretar los diversos componentes de la leche. Primeramente, estas glándulas mamarias producen el calostro y a continuación, dos o tres días después del parto, la leche verdadera que servirá de alimento a los cachorros.

La lactancia está condicionada por la herencia (aptitudes lactantes), la nutrición, por eso es importante alimentar bien a la hembra en este periodo con un buen pienso para perros, puedes comprarlos en nuestra tienda amiga paraperrostienda.com la edad de los animales, su actividad (un trabajo demasiado intenso reduce la secreción láctea). Las enfermedades originan una disminución o un agotamiento de la producción de leche. Después de que se ha efectuado el parto, la mama aumenta de tamaño y se produce un notable aflujo de sangre que asegura que la glándula recibirá una aportación considerable de los elementos necesarios para formar la leche.

La lactancia se produce bajo la influencia de la actividad propia de las células secretoras, pero también gracias a importantes influencias nerviosas: excitación mecánica por la succión al nivel de los pezones, que obliga a la hipófisis a producir prolactina y ocitocina. La lactancia llega a su fin cuando el cachorro deja de mamar, el destete. En este período, la mama engorda, pero luego recobra poco a poco su volumen normal.

La leche

La presencia en la leche de elementos nutritivos depende de la velocidad de crecimiento de los mamíferos en cuestión. Por ejemplo, entre el ganado vacuno, el recién nacido duplica su peso de nacimiento en cuarenta y siete días. El contenido en prótidos de la leche es de 3,5 %. El cachorro de perro alcanza el doble del peso en ocho días, pues el contenido en prótidos de la leche es de 7,1 %, es decir, más del doble, más tarde será conveniente alimentarle con un buen pienso para cachorros

Durante los dos o tres primeros días, la hembra segrega calostro amarillo o castaño, siruposo, muy importante para el cachorro, pues contiene gammaglobulina, en la que se encuentran todos los anticuerpos que hay en la sangre de la madre, con lo que provoca en el cachorro una inmunidad pasiva como la que le daría una inyección de suero, preservándole de diversas enfermedades infecciosas.

La leche verdadera remplaza al calostro y sirve especialmente para el crecimiento rápido del cachorro. La leche contiene células, glóbulos grasos, lípidos, prótidos, lactosa, materias minerales, vitaminas y enzimas. Para una especie determinada es, pues, un alimento completo. Su composición dependerá de las necesidades de la raza. Por ello, la leche de vaca asegurará el desarrollo completo del becerro, pero no podrá hacer lo mismo con el cachorro. 

viernes, 20 de febrero de 2015

Diferentes tipos de regímenes para perros

Régimen del perro obeso

Si nos remitimos a la parte médica, veremos que la obesidad no es únicamente simple cuestión de alimentación. Pero, en los animales sedentarios, ciertos errores en la evaluación de la calorías de la ración y en las aportaciones de elementos nutritivos pueden entrañar una obesidad que sólo podrá corregirse con un régimen. La obesidad es más fácil de prevenir que de curar, pero si ya es demasiado tarde y nuestro perro tiene unos kilos de más, lo mejor es combinar una mayor ejercicio físico con un buen pienso para perros light, casi todas las grandes marcas como royal canin o pienso orijen tienen en sus referencias preparados especiales para estos casos.. A un animal que engorda de forma inquietante habrá que reducirle inmediatamente las grasas y los glúcidos (fécula). Se dará, pues, al animal una ración hipocalórica cuyos elementos esenciales serán carne y verdura. Esta última facilita el tránsito intestinal y no entraña transformación notable en grasa. Servirán de alimentos de lastre para que eliminen la sensación de hambre en el animal. Un animal obeso comerá sólo una vez al día, pues la experiencia demuestra que un animal que come dos veces toma un 20 % más de alimento. Es cierto que el régimen por sí solo no conseguirá curar la obesidad y que a él deberán unirse cuidados higiénicos, tales como paseos diarios bastante largos; también se impone un examen de las diversas funciones hepática y hormonal.

Alimentación del perro viejo

No sufrirá modificaciones, salvo que exista insuficiencia orgánica caracterizada (diarreas crónicas, insuficiencias hepáticas). De forma general, no sirve de nada disminuir la ración bien equilibrada de un adulto. Puede disminuirse la tasa de proteínas si el perro sufre de nefritis crónica. Pero su supresión total constituiría un grave error. Para regular el problema de la sal, deberá consultarse al veterinario, porque solamente un análisis de sangre y un recuento de la reserva alcalina permitirán saber si la sal es nociva o no en esta o aquella circunstancia. En cambio, si nos encontramos con un animal cardiaco, habrá que suprimir la sal de la alimentación, no tanto por su cloro como por su sodio. Existen en el comercio sales de régimen que en lugar de sodio contienen potasio, lo cual las hace más tolerables.


En un perro diabético debe precisarse la naturaleza de la diabetes: algunas diabetes sólo se traducen por una eliminación exagerada de orina y no por un aumento de azúcar en la sangre. En diabetes, los regímenes hipoglucídicos no conseguirán más que agravar el estado del ánimo, Por ello la mejor fórmula consiste en pedir consejo a un veterinario que, tras un análisis de sangre, establecerá un régimen en función de la glucemia.


Alimentación del operado, del herido, del convaleciente


Aparte de las operaciones de estómago e intestino, que exigen una dieta prolongada y una alimentación liquida, un animal que haya sufrido un traumatismo o una operación que hayan provocado hemorragias o pérdidas de sustancias de reserva, recibirá la alimentación prevista para los jóvenes, es decir, que será preciso darle alimentos destinados a reformar los tejidos dañados (hierro, vitamina B12, proteínas ricas, vitaminas A y D).

viernes, 13 de febrero de 2015

Los perros "para todo"


Siempre se ha confiado a los perros toda clase de trabajos y actualmente ejercen los oficios más diversos, pues no solamente realizan sus ocupaciones tradicionales ayudando al hombre en el pastoreo, la caza o la guarda de su vivienda, sino que arrastran carretas de leche en Bélgica y Suiza, buscan a los viajeros perdidos en la nieve, encuentran a los esquiadores atrapados por una avalancha, baten las fronteras. Hay perros de guerra, los que luchan y los que guardan, los que buscan a los heridos y algunos, incluso, a los paracaidistas.

Hay perros que ayudan a los ciegos a atravesar las calles, perros de circo, estrellas de cine, cover-dogs, etc.

A decir verdad, todos estos perros son infinitamente más conocidos hoy como perros de compañía, que como perros de trabajo, y duermen en nuestras casas plácidamente en sus camas para perros y se entretienen con juguetes para perros, pero en otras épocas fueron importantísimos para el hombre.

Buenos en todos los oficios porque comprenden todo, los pastores son numerosos entre estos perros de trabajo. Entre ellos se encuentran el pastor alemán, el briard, el boyero de Flandes y el pastor belga para arrastrar, socorrer o descubrir. Los mejores samaritanos son el Terranova, especialista en salvamento de ahogados y el San Bernardo, considerado como el mejor perro de búsqueda en la nieve.

Los perros de trabajo más rudos son los perros de trineos. Estos, ya sean lapones, esquimales, samoyedos o incluso chow-chows tienen como pariente más o menos próximo al lobo. Todos estos perros del Norte dan testimonio de una asombrosa resistencia al frió y al cansancio y de una fidelidad fundamental al jefe del clan, al amo, aunque en algunos casos no sean tan cariñosos como los perros de pastor.

El oficio que ejercen se va perdiendo, pues los aviones y los helicópteros les van remplazando. Pero durante mucho tiempo han constituido el único medio de desplazamiento del hombre y el único medio de transportar mercancías sobre el hielo y la nieve. Por lo general, su rudeza les hace compañeros bastante difíciles. Sólo el chow se ha suavizado en el transcurso del tiempo y es muy apreciado por todos cuantos se sienten seducidos por su orgullo, su independencia de carácter y su impasibilidad.

Hay que tener en cuenta que estos nórdicos son perros de un solo amo y si existen grados en el crimen puede decirse que abandonar a su chow o a su samoyedo es mucho peor que abandonar un perro de cualquier otra raza, pues nunca se consolará.

viernes, 6 de febrero de 2015

consejos para la alimentación de los cachorros


La comida se debe suministrar a temperatura ambiente, nunca fría. En invierno, si se puede, habrá que calentarla para los animales que viven al aire libre. Muchos perros y sobre todo muchos gatos, después de haber ingerido una comida fría, la vomitan por la molestia y la irritación que se les crea en el intestino.

Recomiendo especialmente que se acostumbre al perro y al gato a comer alimentos duros —galletas, croquetas— para reducir o retrasar la formación de sarro, que tiende inevitablemente a acumularse en los bordes de las encías.

Esta práctica, adoptada ya por muchos propietarios, debe entrar a formar parte de la rutina diaria incluso para los perros de talla enana o pequeña, a ser posible desde cachorros. El perro y el gato al principio de su vida familiar no saben qué es el jamón, los dulces, el chocolate; y tampoco tienen el vicio de pedir «bocaditos» extra en la mesa.

Si los acostumbramos, tendremos que soportar o comprender sus coherentes exigencias: «¿porqué un día me da y otro no? ¿Por qué quiere que me coma lo del tazón si prefiero el jamón o los dulces?».

Los perros y los gatos no saben qué alimentos les pueden sentar bien o mal, por ello es nuestro deber moral cuidarlos y atender a su bienestar.

Aquí te dejamos una guía para comprar un pienso para perros adecuado y que aprendas algo más sobre la comida para perros